Estaba destinada para salvar muchas vidas, evitar que pescadores fallecieran por descompresión y para personas con pie diabético que pudieran perder alguna extremidad
José Pallotta/OGY: Progreso, Yucatán 19 de enero 2023-.
¡Hace ya casi 6 años que el entonces diputado federal Jorge Carlos Ramírez Marín, hoy! senador por Yucatán, junto con un grupo de representantes de la iniciativa privada donaron una cámara hiperbárica al municipio del puerto de Progreso Yucatán, la que en la actualidad se encuentra como chatarra en patios de los servicios públicos municipales de este puerto, que curiosamente tambien ahí es la cede de Protección Civil de ese puerto.
Dicha cámara hiperbárica estaba destinada para salvar muchas vidas, evitar que pescadores fallecieran por descompresión y para personas con pie diabético que pudieran perder alguna extremidad, pero ahí sigue abandonada por más de 5 años en franco proceso de deterioro por la falta de uso y expuesta a los elementos del tiempo.
Cabe señalar que desde que fue donada la cámara hiperbárica, jamás fue puesta en funcionamiento a pesar de los constantes exhortos que se le formulaban al alcalde de Progreso Julián Zacarías quien fue reelecto en los más recientes comicios.
El 11 de agosto del 2021, el equipo de El Observador Gráfico Yucatán, publicó el abandono en el se encontraba esa Camara Hiperbarica, hoy! Progreso continúa adoleciendo de una cámara hiperbárica, no obstante que el Ayuntamiento cuenta con una pero por falta de voluntad y del evidente desinterés del alcalde Julián Zacarías quién más se encuentra preocupado promocionando su imagen en redes sociales y alimentando su ego personal, en vez de velar por los intereses la salud de miles de personas que habrían hecho uso de ese equipo médico.
Quizás por beneficiar intereses ajenos, tales como hospitales privados de Mérida, el edil progreseño nunca mostro interés por instalar la Cámara Hiperbalica, y a causa de ello, los progreseños tienen que acudir a clínicas particulares a recibir tratamiento por pie diabético y otros padecimientos, incluso descompresionados algunos de los cuales han fallecido.
Julián Zacarías quién más se encuentra preocupado promocionando su imagen en redes sociales y alimentando su ego personal, en vez de velar por los intereses de la salud de miles de personas que habrían hecho uso de ese equipo médico.
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La desidia y desinterés criminal del edil progreseño ha sido causa de que numerosas personas hayan perdido la vida por descompresión, al perder tiempo y minutos vitales en el traslado a la ciudad de Mérida, qué para ingresar a las calles y vías que conducen a los hospitales se encuentran atestadas del tráfico vial qué impide a los vehículos de auxilio llegar en tiempo y forma a las unidades de atención médica cuándo se trata de algún descompresionado.
La cámara hiperbárica fue donada a los habitantes del municipio de Progreso, sus comisarías y todos aquellos municipios costeros hasta Dzilam de Bravo, para que reciban atención médica, no fue donada para que esté arrumbada deteriorándose.
Esa fue la idea de donarla, brindar atención a aquellos pacientes que requerían atención médica sobre todo aquellos con pie diabético.
Sin embargo el alcalde apuesta en subrogar el servicio a particulares o a compadres y amigos mientras tiene ahí una cámara hiperbárica qué se encuentra semicubierta parcialmente por una vieja lona.
El interior de la unidad presenta ya los estragos del tiempo con el polvo y el salitre, pues la cabina permanece abierta desde hace varios meses, y las fotos no mienten y dejan en evidencia a un alcalde que poco le importa la salud de los progreseños así como de los habitantes de los municipios cercanos sobre todo aquellos bustos que sufren algún tipo de descompresión.
Hoy en día, si un pescador sufre alguna descompresión, es trasladado a Mérida, en el trayecto de la embarcación a Progreso o cualquier otro puerto de la costa, son minutos valiosos, luego el traslado a la ciudad de Mérida donde esta el Hospital Agustín O´Horán donde “se supone que hay otra cámara hiperbárica”.
Hay que señalar que más de una decena de buzos han perdido la vida por el simple hecho de no ser atendidos en tiempo y forma, situación que se hubiese evitado sí la cámara hiperbárica estuviera funcionando.
Pero no es así, la unidad no funciona y prefieren llevar a descompresionados hasta la ciudad de Mérida, dónde los operadores de las ambulancias tienen que sortear embotellamientos viales a toda hora, así como a conductores negligentes que no ceden el paso a los vehículos de auxilio.
Un traslado de dzilam de bravo a progreso se realiza en 45 minutos se trata de una vía libre sin tráfico vial.
Un traslado de Dzilam de Bravo a Mérida lleva 2 horas como mínimo, más los minutos que se pierden en atravesar la ciudad o transitar las vías primarias o secundarias del norte de Mérida donde todo el tiempo hay tráfico y caos vial…(José Pallotta/OGY)
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