José Pallotta/OGY: Mérida, Yucatán.
Todo apunta a que los diputados locales de MORENA han iniciado una campaña de desprestigio -mejor conocida como “Guerra Sucia”- con miras a las elecciones de 2027, enfocándose en el Ayuntamiento de Mérida, actualmente dirigida por Cecilia Patrón Laviada, del Partido Acción Nacional.
Es necesario subrayar que la alcaldesa Meridana, hace enormes esfuerzos para componer el desastre que su antecesor le heredo, acompañado de deudas y obras inconclusas, hasta ahora, Patrón Laviada lo ha hecho bien.
Pero en Yucatán, el partido Morena parece no estar dispuesto a compartir ni una “rebanada” del pastel político; lo quiere completo, su principal objetivo es arrebatar el Ayuntamiento de Mérida y lo está intentando a través de estrategias que buscan desinformar a los meridanos, una de estas tácticas es desacreditar las obras públicas realizadas por la administración.
Bloqueo al presupuesto municipal: ¿un golpe estratégico?
El pasado 13 de diciembre, durante la sesión de la Comisión de Presupuesto, Patrimonio Estatal y Municipal, se discutió la propuesta de ajustar el valor catastral de las propiedades en Mérida, una medida promovida por legisladores panistas.
Sin embargo, la mayoría de los votos de los diputados de Morena y sus aliados impidieron la aprobación de esta iniciativa, argumentando que aumentaría el Impuesto Predial, lo que, según ellos, sería un duro golpe al bolsillo del ciudadanos.
Con esta decisión, el Congreso del Estado ha “amarrado” las manos al Ayuntamiento de Mérida, limitando su capacidad para realizar obras públicas como alumbrado, mantenimiento de parques, reparación de baches y otras necesarias.
El trasfondo político: un plan para debilitar al PAN en Mérida
La intención detrás de estas acciones parece clara: reducir los recursos del municipio de Mérida para obligar a la administración panista a incumplir con los ciudadanos.
Esto generaría un descontento que Morena buscaría capitalizar en las urnas en 2027, con la esperanza de obtener el control total del Estado de Yucatán, y al parecer, son órdenes de arriba...(José Pallotta)